Reseñado por: JML
Dirigida por:
Zack Snyder.
Fecha de estreno:
14 de Junio de 2013 (USA) / 13 de Junio de 2013 (Chile)
Reparto:
- Henry Cavill / Superman, Clark Kent.
- Michael Shannon /
General Zod.
- Amy Adams / Lois Lane.
- Russell Crowe / Jor-El.
- Antje Trauje / Faora.
- Laurence Fishburne /
Perry White.
- Ayelet Zurer / Lara.
- Diane Lane / Martha
Kent.
- Kevin Costner /
Jonathan Kent.
- Harry Lennix / General
Swanwick.
- Christopher Meloni /
Coronel Hardy.
- Richard Schiff / Emil Hamilton.
Duración: 143 minutos.
Presupuesto: U$ 225.000.000.-
Recaudación: U$ 668.045.518.-
Y por fin llegó el día… Como nunca moví los
hilos para conseguirme entradas para poder ver Man of Steel en función de avant
premiere. He llegado a mi casa, 12 de Junio y son cerca de las 0.45 hrs.
mientras escribo estas líneas. Soy feliz en decir que la película no me
decepcionó, y espero que a quienes son asiduos a nuestro blog y en particular
al hombre de acero tampoco.
Empiezo a desglosar las ideas que llenan mis
pensamientos por parte. Primero que nada se agradece que por fin tras 35 años
desde el estreno del Superman de Richard Donner - interpretado por el maestro Christopher Reeve - se haya tenido la
sensatez de dar un paso más allá y los ejecutivos de Warner Bros – dueños de DC comics por cierto – hayan
optado por creer en el azuloso nuevamente para presentarnos la visión de Zack
Snyder como director basado en un competente guión de David S. Goyer, plantando por
fin a un Superman acorde a los tiempos que vivimos, tanto en el ámbito de las
nuevas audiencias por cautivar como de los grandes adelantos que el cine actual
tiene para ofrecer.
Despegándose de todo lo anterior, pero
manteniéndose lo esencial – valga decir
los tres grupos de personajes y lugares inmutables: Krypton, Jor-El, Lara /
Smallville, Jonathan Kent, Martha Kent / Metrópolis, Daily Planet, Lois Lane –
“Man of steel” nos ofrece una nueva panorámica de la historia de Superman, la
cuál no molesta ni incomoda desde la perspectiva del fan del cómic. Superman es
uno - sino el más – de los personajes
a los cuales más se les ha manoseado el origen, con cambios cada vez que a
alguien se le ocurre o que la situación lo amerite. En algunas versiones es más
poderoso, en otras menos. En algunas Lois ha descubierto su secreto, en otras
él se lo ha revelado. En algunas versiones Jonathan Kent ha muerto, en otras
sigue vivo hasta la edad adulta de Clark. En algunas ha obtenido sus poderes de
niño, en otras de adolescente. Si nos ponemos a contar cuantas versiones de la
historia de Superman conocemos, tanto en cómic, en cada programa de TV o
dibujos animados, en cada película o inclusive videojuegos, sin contar los
siempre interesantes Elseworlds nos faltarían los dedos de las manos y los pies
para contar.
Man of steel comienza a tejer su propia
mitología, adentrándonos de partida en el mundo de Krypton como nunca antes se
había hecho en el cine. Paisajes que parecen sacados de Star Wars le dan vida a
un Krypton con el cuál las nuevas generaciones se maravillarán, dejando atrás
por fin el esquema de cristales tan vilipendiado que inició en las películas
protagonizadas por Christopher Reeve. Se explica que el nacimiento de Kal-El es
el primer parto natural que ha habido en miles de años, pues Krypton controlaba
la natalidad gracias a sus grandes avances de ingeniería genética. Pero la
sobreexplotación de los recursos naturales del planeta lo han llevado al borde
de la destrucción, por lo que Jor-El ha tomado medidas al respecto. Sin
extenderme más de lo necesario resulta notable que en comparación a la Superman de 1978 se haya
dedicado más metraje a Krypton que a la llegada de la nave a Smallville. Al
respecto se obvió esta parte – la cuál
por cierto es archi conocida por el común de la gente sin necesidad de ser un
ñoño – y sólo se ven a modo de flashback algunos pasajes de Jonathan Kent
interactuando con su hijo así como su paso por Smallville. A este respecto me
faltó más Jonathan. Ese factor que inspira a Clark a ser buena persona con el
ejemplo de un hombre que no es perfecto, pero que siempre hace lo correcto a
los ojos de su hijo. Y haciendo esta relación sobre la cantidad de metraje que
se le dedica a lo Kryptoniano, es sin duda un factor latente a lo largo de todo
el film, donde se antepone la parte alienígena a lo humano. Pero el final de la
película adelanta que en caso de haber alguna continuación habrá tiempo para
profundizar en el factor humano de Clark Kent, así que a no desesperar por ello
– y esperemos que sea el Clark Kent
ganador y con aspiraciones como se nos presentó en la etapa de John Byrne, y no
el típico papanatas que se hace el gil para pasar piola -.
Como la trama gira en torno al aspecto
alienígena del personaje, se recurrió al siempre peligroso general Zod como
antagonista del film, quien se explica logró sortear la destrucción de Krypton
cumpliendo una condena en la Zona Fantasma.
Al que espera encontrarse con un Zod como el que vimos en Superman 2 de 1981,
se encontrará con algo totalmente distinto y sin ningún dialogo que diga “Arrodíllate ante Zod”. Este Zod es
bastante sólido desde todo punto de vista. Un militar que busca a toda costa
cumplir sus metas, que en su obnubilada mente son las correctas, a pesar que
deba destruir todo a su paso para lograr llevarlas a cabo. Bajo la excusa de
hacer todo por Krypton, Zod se convierte en todo lo opuesto a las creencias que
defiende Kal-El, que con el tiempo comienza a ser llamado Superman.
Las batallas con Zod y el resto de los
Kryptonianos, entre ellos Faora, son como deben ser. Toda una gozada visual,
con destrucción por doquier y un Superman que no se refrena a la hora de
luchar. A este respecto, un momento que puede causar revuelo y conmoción para los fans más puritanos es el desenlace de la pelea entre Superman y Zod.
Superman se ve obligado a matarlo, rompiéndole el cuello. La situación desde
luego lo ameritaba, siendo como última medida extrema algo necesario. Pero se
rompe un dogma del personaje, el no matar. En los cómics Superman en una
ocasión se vio obligado a matar a una versión del general Zod de un universo de
bolsillo, lo que originó una serie de problemas mentales al azuloso, que
inclusive lo llevaron a exiliarse en el espacio. Pero hay que recordar que cada
versión es distinta, y era la opción más lógica a seguir. También le da cierto
sentido de verosimilitud tener a un Superman que se hace cargo.
Pasemos a los aspectos de casting. “Man of
Steel” más allá de ser otra oportunidad para Superman, pasó a ser la película
de las segundas oportunidades tanto para Henry Cavill que ya había audicionado
para “Superman returns” como para Amy Adams quien por tercera vez trataba de
hacerse del papel de Lois Lane, primero en el fallido proyecto “Superman flyby”
y después en “Superman returns”. Henry Cavill hace un correcto trabajo. Como es
menester el comparar tan sólo puedo indicar que es difícil comparar en este
caso, debido a que lo vemos en un papel muy lineal pues en todo el metraje lo
vemos afrontando una sola faceta de su vida, a diferencia de Christopher Reeve
por ejemplo, quien debía desdoblar su actuación para poder diferenciar a Clark
Kent de Superman. Como decía más arriba, en las posibles secuelas deberemos
verlo sortear esta faceta de doble identidad. Amy Adams es una sólida Lois
Lane, quien como actriz hace bien su pega y sin perder la esencia de quien es
Lois no se hace tan pesada como otras actrices que han interpretado al
personaje. Michael Shannon es un Zod psicópata y guerrero que se aferra en todo
momento a la esencia de su ser sin renegar lo que es, lo cuál lo hace ser un
rival peligroso en todo momento, más aún cuando consigue controlar sus
habilidades. No es un villano como para poner en el olimpo de las
interpretaciones como el Joker de Heath Ledger, pero tiene lo suyo. El resto
del reparto bastante bien en sus labores. Me faltó ver más a Kevin Costner como
Jonathan o a Diane Lane como Martha. Russell Crowe interpreta a un buen Jor-El.
Para los que tengan buen ojo, en algunas secuencias se pueden ver a personajes
como Lana Lang o Pete Ross. Y ya que andamos en esas, ojo para los fans de la
serie “Smallville” que algunos cuantos actores que se pasearon por la serie – donde también apareció Amy Adams por cierto
– tienen algunos pequeños papeles en el film. A quien se extraña a sobremanera
es a Lex Luthor, pero ojo que hay bastantes referencias a Lexcorp, un indicio
de que se está guardando para más adelante, con la intención de no tirar toda
la carne a la parilla tan rápido.
La dirección de Snyder se hace notar en lo
espectacular más no tanto en la técnica, considerando que es asiduo al recurso
del slow motion. Escenas rápidas e intensas, con destrucción masiva y luchas de
poder por doquier. Los efectos especiales a cargo de Weta, impecables. La
música a cargo de Hans Zimmer es bastante épica, pero en mi caso en particular
se me hizo raro ver una película de Superman sin oír la clásica música de
siempre de John Williams. El guión de David S. Goyer bien elaborado.
Christopher Nolan figura como productor ejecutivo, pero el hombre siempre
humilde en cada declaración le da el mérito de todo a Snyder. El vestuario con
un traje bastante más oscuro a lo habitual y sin calzoncillos rojos le hace
lógica a los conceptos del Krypton que vemos en el film, y como en otros casos
pasa a ser un factor bastante secundario a la hora de disfrutar el visionado
del film. Aparte que es un look más apegado a la actualidad en los cómics, los
New 52.
Nota: 6,0 (Chile) / 8,5 de 10 (Global).
Para el público en general un buen
entretenimiento. Para los fans acérrimos un buen regalo para el 75 aniversario
del personaje.
No me explayaré mucho más. Tan sólo recalco que es una buena película, vayan a verla y disfrútenla con sus palomitas de maíz. No sé si será por la edad que uno se va poniendo más exigente o simplemente que por tanta ilusión la película se me hizo corta, pero a pesar de quedar maravillado quede un poco insatisfecho, no en el sentido de que haya sido mala experiencia, todo lo contrario. Pero me hubiese gustado algo más como alguna referencia al universo DC bien explicita - más allá de un satélite de empresas Wayne - o alguna escena post-crédito. Quede con esa sensación de que faltó un pequeño algo para haber sido más redonda.
Pero siendo honesto y comparativo con el
mercado actual y competencia, como producto individual es mucho más que Iron man 3. Tenía que decirlo. Espero que la rompa en taquilla y se inicie por fin
el tan esperado universo DC cinematográfico de una buena vez por todas.
Por cierto, quien tenga la posibilidad que lea
el cómic precuela – reseñado algunos días
atrás en el blog - antes de ver la película que es buena lectura
complementaria.
En lo referente a la sección “Cine”, ya
volveremos próximamente para reseñar “The Wolverine”. Recuerda seguirnos también por Facebook o Twitter.
Gracias por tu visita. Será hasta una próxima ocasión. 😉
visiten multiversityprojections.blogspot.com y comenten
ResponderEliminarSe fijaron en el logo del satelite que destruyen Superman y Zod??
ResponderEliminarSaludos
Y también hay gran cantidad de referencias a Lexcorp. Sin duda se animarán a hacer secuelas y extender el universo DC en el cine.
EliminarSaludos!!!