Reseñado por: JML
Dirigida por:
Bryan Singer.
Fecha de estreno:
19 de Mayo de 2016 (Chile) / 27 de Mayo de 2016 (USA)
Reparto: - James McAvoy /
Charles Xavier.
- Michael Fassbender / Erik Lensherr - Magneto.
- Jennifer Lawrence / Raven Darkholme - Mística.
- Oscar Isaac / En Sabah Nur - Apocalipsis.
- Nicholas Hoult / Hank McCoy – Bestia.
- Rose Byrne /
Moira McTaggert.
- Tye Sheridan / Scott Summers –
Cíclope.
- Sophie Turner / Jean Grey.
- Olivia Munn / Elizabeth Braddock -
Psylocke.
- Lucas Till / Alex Summers – Havok.
- Evan Peters / Peter Maximoff -
Quicksilver.
- Kodi Smit-McPhee / Kurt Wagner –
Nightcrawler.
- Alexandra Shipp / Ororo Munroe –
Tormenta.
- Josh Helman / William Stryker.
- Ben Hardy / Warren Worthington III
– Ángel.
- Lana Condor / Jubilation Lee -
Jubilee.
- Hugh Jackman / Arma X.
- Tómas Lemarquis
/ Caliban.
Duración: 144 minutos.
Presupuesto: U$ 178.000.000.-
X-men: Apocalipsis me produjo sensaciones
agridulces tras su visionado. Por un lado no es una mala película, pero por el
otro cae en demasiados tópicos usuales del cada vez más creciente género de las
adaptaciones de comics de superhéroes.
Cerrando esta segunda trilogía mutante, Bryan
Singer quiere dotar de una nueva dimensión a la rebooteada franquicia
presentándonos a un villano de otro nivel en Apocalipsis. Lamentablemente se
queda corto en sus intenciones.
Vamos por parte. De los 144 minutos de
duración que tiene el film partimos con una buena escena de introducción en
Egipto que despierta el interés por la trama. Sin embargo, de ahí en más le
cuesta mucho despegar a la historia en busca de darles contexto a los
personajes principales – de los muchos
que hay -. Falta mayor fluidez narrativa entre el desarrollo de personajes
y la acción dura y pura.
Sobre la trinidad de personajes principales de
esta trilogía nos encontramos en diferentes niveles. Partiendo por Charles
Xavier vemos a un hombre que ha renovado su esperanza tras los sucesos del
previo film, llevando a cabo a cabalidad su sueño de integración en su escuela
para jóvenes dotados. James McAvoy logra ser consecuente con el personaje que
ha interpretado a lo largo de esta segunda trilogía.
Por su parte, Magneto se ha apartado de los
problemas y se ha asentado con una familia. Pero los problemas lo persiguen
para bien o para mal. Su arco personal se presenta bastante interesante
abarcando la continua tragedia en su vida. Sin embargo, una vez que Magneto se
convierte en un jinete de Apocalipsis su rol se torna bastante plano truncando lo
bueno que podría haberse seguido desarrollando. Un actor capaz como Michael
Fassbender logra salir airoso de los baches argumentales y dignificar al
personaje pese a todo.
En cuanto a Mística, contrario a lo que se
podía pensar de los trailers, su papel no es tan avasallador. Tras los sucesos
del previo film, Raven es vista como una heroína para las nuevas generaciones
mutantes. Pero la verdad es que ella no se cree el cuento. Ya sea porque se
tomó el papel muy enserio o porque de verdad estaba desganada, da la impresión
que en esta ocasión Jennifer Lawrence no da lo mejor de sí.
De los viejas caras conocidas Moira McTaggert
(Rose Byrne), Bestia (Nicholas Hoult) o Lucas Till (Havok) cumplen con lo
esperado, dejándole espacio a las nuevas caras que interpretan jóvenes
versiones de viejos conocidos. Cíclope es interpretado por Tye Sheridan quien
da trazas que a futuro podríamos ver a un Cíclope fílmico que le haga justicia
al personaje. En el caso de Jean Grey tenemos a Sophie Turner que físicamente
es muy parecida a su símil de las viñetas aunque le falta rodaje. En el caso de
ellos, así como Tormenta (Alexandra Shipp) o Nightcrawler (Kodi Smit-McPhee) se
presentan como el necesario recambio generacional, aunque sin alcanzar el
carisma de sus viejos intérpretes. Con el final del film queda la promesa de
que en caso de haber una nueva secuela los veamos ya como X-men bien formados.
Caso especial es Quicksilver, quien nuevamente
en sus apariciones se roba la película. Tenemos una escena análoga a la del film
anterior pero multiplicada por diez en espectacularidad, bajo el ritmo de
“Sweet dreams” de Annie Lennox. No cabe duda que en Fox de momento le han
sacado mejor provecho al personaje que en Marvel studios.
El otro caso especial es la aparición de Wolverine
– que no podía faltar – que se nos
presenta más bestial que nunca antes. En su corta aparición se trata un tema
que no se había abarcado en el cine: su faceta de Arma X. En los previos films
nunca lo alcanzaron a programar como Arma X dado que cuando le inyectaron el
adamantium escapaba de inmediato. En esta rebooteada continuidad Bryan Singer
retoca este aspecto para deleite especial de los fans de las viñetas. Esta
secuencia es insertada en medio de la historia de modo un tanto forzado, una
jugada que apela por sobre todo al gancho que aún tiene el mutante canadiense.
Llegando al antagonista, Apocalipsis en ningún
momento llega a convencer del todo como la gran amenaza mesiánica que pretende
ser. Su plan de destruir el mundo para edificar uno mejor desde luego tiene
ribetes apocalípticos pero en ningún momento se logra un desarrollo que nos
lleve a entender el porqué de su accionar. Por ejemplificar, uno puede entender
y hasta empatizar con Magneto, pero con Apocalipsis todo parece suceder porque
sí. Tal como sucedió con Ultron en la secuela de los Vengadores, Apocalipsis se
queda en el limbo de los buenos villanos que pudieron ser. Y desde luego, una
lástima desperdiciar a un buen actor como Oscar Isaac.
Nota aparte: Olivia Munn como Psylocke es demasiado
atractiva, pero no representa ningún aporte significativo salvo el deleite
visual.
Nota:
4,0 (Chile) / 5,7 de 10 (Global).
Ya van seis films grupales de X-men, cuatro de
ellos dirigidos por Singer. Pese a toda la parafernalia visual que Singer nos
entrega en esta ocasión - a mi parecer
tratando de equipararse con lo que está haciendo Marvel studios – bajo mi
óptica ha sido la más débil de sus contribuciones a la franquicia. De a ratos
la cinta se pierde en la espectacularidad visual de los efectos especiales por
sobre el factor interpretativo, cosa que a la larga hace mella en el resultado
final. Por primera vez en lo que va del año puedo coincidir en varios aspectos
con la crítica especializada.
Se cumple con un nuevo capítulo que cierra
puertas y abre otras nuevas. Siguiendo a favor de la renovación creo que Singer
debería dar un paso al costado y dejarle paso a nuevos cineastas para no
terminar quemándose.
En lo que respecta al futuro, Simon Kinberg ha
declarado que siguiendo la tradición que se ha dado desde Primera generación ambientada en los ’60, Días del futuro pasado en los ’70 y la actual Apocalipsis en los ’80, el
siguiente film estaría ambientado en los ’90.
Y ojo con la escena post-crédito presentada en
esta ocasión que tendrá implicancias de cara a futuros films de X-men, así como
de Wolverine o hasta el de Gambito. Cosas “Siniestras” vienen en camino… Nuff
said.
Antes de despedirme dejo en claro que este
artículo corresponde a mi opinión personal del film. Cada quien debe hacerse su
propia opinión, y desde luego la intención de estos artículos es motivar a que
vayan a las salas de cines por sobre todo.
Muchas gracias por tu visita.
Muy buen día.
Saludos.
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