ESCUADRÓN SUICIDA: LOS REVOLUCIONARIOS – DC COMICS

Reseñado por: JML
Edición original: Suicide Squad # 11 (Nov-2020)
Guión: Tom Taylor.
Arte: Bruno Redondo.
Color: Adriano Lucas.
Portadas: Bruno Redondo, Jeremy Roberts.
 
 

Guión: Con este número damos por finalizada la maxiserie de once números del Escuadrón Suicida. Al ver la abrupta manera en que se cierra la narrativa, hace dudar bastante que este producto haya sido ideado como una serie limitada. A pesar de lo que se diga de manera oficial, da a entender que se trataba de algo a más largo plazo que se le dio una fecha límite de improviso.
 En lo personal quedé decepcionado con un final que no era lo que esperaba. El cliffhanger que cerró el número previo daba para algo un poco más parafernalico y rimbombante, sin embargo, se optó por un cierre de lo más tradicional.
 ¿Volveremos a saber de Los Revolucionarios – los verdaderos protagonistas del cómic - a futuro?... Sólo el tiempo lo dirá…
Nota: 4,0.
 
 
Arte: El arte de Bruno Redondo sí que fue lo más constante a destacar dentro de este cómic. Si bien tuvo un par de números en que fue reemplazado por Daniel Sampere, con su trabajo ha demostrado nuevamente que está para grandes cosas. Como mencioné en la reseña previa, lo veremos ilustrando el cómic de Nightwing en la etapa Infinite Frontier. Bien merecido. Hay talento y ganas… Ojo con el guiño visual donde cierto ex-presidente de EEUU recibe una paliza…
 Sobre las portadas, lo bueno de este número final es que ha traído el regreso de Jeremy Roberts en la ilustración de la portada alternativa. Todo un crack.
Nota: 6,0.
 
 

Historia: En una morgue de Louisiana, Jog es regresado a la vida por Black Racer, revelándose que este es su padre. Black Racer clama que Jog tiene un lugar entre los dioses, sin embargo, él tiene cosas más importantes que hacer antes.
 Badhnisia. Jog corre a toda velocidad para salvar a sus amigos. Con la ayuda de Zebra-man son capaces de contener lo suficiente la explosión para que detone en medio del océano. Todos se sorprenden de ver con vida a Jog. La Liga de la Justicia aparece con la intención de llevarse bajo custodia a Black Mask y al Escuadrón Suicida, sin embargo, si bien se les entrega a Sionis, la presidenta de Badhnisia no está dispuesta que se lleven a los héroes que salvaron su nación, entre ellos su hija.
 Una vez la Liga se va, Harley se plantea si quedarse o no con sus nuevos amigos. Ella tiene cosas qué hacer, por lo cuál se va agradeciendo el tiempo que pasaron juntos. Lo primero que hace Harley es visitar a Zoey, la hija del difunto Deadshot, contándole que su padre murió como un héroe. La niña le pregunta si su padre fue bueno, a lo cuál Harley se queda contándole historias de sus proezas.
 Dos días después, Osita y su equipo raptan a una serie de personas de importancia dentro del programa Task Force X, amenazándoles con exponer sus secretos más sucios si siguen interfiriendo en sus asuntos. El Escuadrón Suicida ha muerto, es hora de una revolución…
Nota: 4,0.
 

 
Nota final: 4,6 (Chile) / 6,5 de 10 (Global).
 PLOP. No sé si culpar a DC comics o a Tom Taylor por este insatisfactorio final. Culpas compartidas. Viendo que el cómic del Escuadrón Suicida será reformulado en la etapa Infinite Frontier en base a lo que veremos en el film The Suicide Squad de James Gunn – con Peacemaker como cara visible -, se entiende el afán de DC por darle rápido carpetazo a esta iteración de Tom Taylor. Pero, tampoco es excusa para un final tan meh… En fin…
 
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