Reseñado por: JML
Edición original: The Flash # 74 (Mar-1993)
Guión: Mark Waid.
Dibujo: Greg LaRocque.
Tintas:
Roy Richardson.
Color:
Matt Hollingsworth.
Portada: Greg LaRocque.
Guión: Tras el impactante
regreso de Barry Allen en el final del número anterior, Wally West pone
los pies en la tierra, teniendo la duda
razonable sobre si su retornado mentor es el original o un impostor.
Tras compartir con él durante algo más de una semana, Wally se termina de
convencer que Barry es quien dice ser
cuando va a visitar la tumba de Iris.
Mark
Waid nos ofrece un relato bien nutrido, que deja en todo momento lugar a la
suspicacia. Leyendo esta historia en
la época que fue publicada resultó ser toda
una montaña rusa de emociones, porque los lectores, al igual que Wally,
no teníamos la certeza sobre si Barry
era quien decía ser. Una muy buena
jugada por parte del escritor, sin duda…
Excelente lectura, el Flash de Mark Waid seguía tomando impulso a un ritmo vertiginoso, con cada nuevo número marcando historia.
Nota: 6,0.
Arte: Greg
LaRocque ofrece una buena compañía visual al relato de Waid. En esta
ocasión podemos contemplar a ambos Flash
compartiendo escena, algo inédito
hasta ese momento, pudiendo diferenciar
bien los detalles de cada cuál, Wally
con su traje de tela metalizada y ojos
blancos, “Barry” con el traje clásico de Flash. Todo salomónico
y coherente.
Un
detalle a ojo de aficionado observador, en el flashback que se hace sobre Crisis en Tierras Infinitas al comienzo de este número, respecto al momento al que
se hace alusión, el Capitán Atom aparece
con el look equivocado. No todo es perfecto...
Nota: 6,0.
Excelente lectura, el Flash de Mark Waid seguía tomando impulso a un ritmo vertiginoso, con cada nuevo número marcando historia.
Nota: 6,0.
Nota: 6,0.
Wally y Barry se enfrentan directamente al jefe de la mafia y él admite que él mismo había difundido la información sobre su peligro para que Flash lo protegiera. El plan de Giacomo funciona, ya que Wally y Barry no tienen ningún problema en encontrar a los tres sicarios y entregárselos a la policía. Pero poco después, Barry desaparece y Wally lo sigue hasta el cementerio, donde Barry visita la tumba de su difunta esposa Iris. Entre lágrimas, Barry se para frente a la tumba y recuerda cómo le había pedido a Iris que se convirtiera en su esposa. Eso sucedió justo en la noria del parque de diversiones de Central city. Cuando Wally ve esto, se siente mal por dudar de su mentor. Barry no había mencionado a Iris desde su regreso porque pensaba que era injusto que ella no pudiera volver a la vida también. Pero ahora Barry quiere mirar hacia adelante y aprovechar la segunda oportunidad que se le ha dado, no sólo para vivir una nueva vida, sino también para correr al lado de Wally West...
Nota: 6,0.
La calma antes de la tormenta… Las cosas no harían más que seguir agitándose en los números posteriores. Ya habrá tiempo para hablar de ello en las siguientes reseñas…
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