Reseñado por: JML
Edición original: The Flash # 87 (Feb-1994)
Guión: Mark Waid.
Dibujo: Mike Wieringo.
Tintas: José Marzán Jr.
Color: Gina Going.
Portada: Alan Davis.
Guión: Al parecer la época navideña no es la mejor para Wally West. En la celebración anterior sufrió el trago amargo del regreso de Barry Allen, que no resulto ser más que un engaño. En esta ocasión, partiendo por una inédita ola de calor que afecta a Keystone city, Wally anda con un humor de los mil demonios, y las cosas no harán más que empeorar cuando recibe una inesperada noticia…
Sin darle un respiro al personaje, Mark
Waid es un perfecto maestro de ceremonias para relatar las aventuras de Flash.
Un despliegue de genialidad acorde a las aventuras del hombre más
rápido del mundo, siempre en movimiento, sin darnos siquiera un respiro.
Y en este número, ya quedando clara la identidad del villano tras las
sombras, más problemas se aproximaban, a toda velocidad…
Nota: 6,0.
Arte: Mike Wieringo ilustra este ejemplar navideño en su totalidad, dando trazas de su constante evolución como ilustrador y lo bien cogido que ya le tenía el pulso a Flash y sus secundarios. El toque de ver a los traficantes de droga disfrazados de Santa Claus, apropiado en toda instancia.
La habitual portada del maestro Alan
Davis, también totalmente a tono de la ocasión.
Nota: 6,0.
Guión: Al parecer la época navideña no es la mejor para Wally West. En la celebración anterior sufrió el trago amargo del regreso de Barry Allen, que no resulto ser más que un engaño. En esta ocasión, partiendo por una inédita ola de calor que afecta a Keystone city, Wally anda con un humor de los mil demonios, y las cosas no harán más que empeorar cuando recibe una inesperada noticia…
Nota: 6,0.
Arte: Mike Wieringo ilustra este ejemplar navideño en su totalidad, dando trazas de su constante evolución como ilustrador y lo bien cogido que ya le tenía el pulso a Flash y sus secundarios. El toque de ver a los traficantes de droga disfrazados de Santa Claus, apropiado en toda instancia.
Nota: 6,0.
Flash vuelve a patrullar y se ocupa por primera vez de una pandilla de adolescentes que buscaban problemas en una juguetería. Un poco más tarde, comienza la fiesta de Navidad en la casa de Wally y, para pesar de Linda, Wally no está por ningún lado. La razón de esto son los traficantes de cocaína que vendían sus drogas, disfrazados de Santa Claus.
Después de que Flash finalmente los acaba, regresa a casa, pero la fiesta ya ha terminado. Habla con el Flautista, que dormitaba en el sofá, sobre su mal día. Wally no tiene idea de que lo observa una cámara escondida en uno de los adornos navideños. Mirándolo está Abra Kadabra, quien también se aseguró de que Flash no descansara en noche buena. Pero las cosas se ponen aún peor para Wally, porque recibe la notificación de que alguien lo está demandando por negligencia...
Nota: 6,0.
Para quienes fuimos coleccionistas en los ’90s, con este número fue que ediciones Zinco comenzó la publicación de sus tomos compilatorios de Flash. Un extraño punto de partida, pero peor era nada. Por suerte, hoy en día los cómics son más accesibles, si no los puedes leer en papel, siempre está la opción digital. Mirado en perspectiva, los aficionados de hoy la tienen bastante fácil en comparación a lo que nos tocó vivenciar a los que ya llevamos tiempo en esto…
De momento me despido, muchas gracias por tu visita. Si gustas de este blog puedes seguir sus novedades mediante las redes sociales, en Facebook o Twitter, donde además podrás encontrar diversas noticias relacionadas al mundo del cómic.
Será hasta una próxima ocasión. Qué tengas un excelente día. 😉
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