Reseñado por: JML
Edición original: Absolute Wonder woman # 1
(Oct-2024)
Guión: Kelly
Thompson.
Arte: Hayden
Sherman.
Color: Jordie Bellaire.
Portada: Hayden Sherman.
Portada: Hayden Sherman.
Una interesante lectura que demuestra que de vez en cuando es bueno ofrecer nuevas perspectivas de los viejos mitos, mejor aún si se hace con buen oficio.
Nota: 6,3.
Nota: 6,3.
Retrocediendo años atrás, en la Isla Salvaje del Infierno, se encuentra el páramo estéril como prisión para la gran hechicera Circe. Mientras busca los recursos que pueda encontrar en las tierras estériles que ahora llama hogar, recibe la visita de un ser de luz pura, el dios Apolo. El dios del sol le ordena que se acerque y le entrega al nuevo ocupante de la prisión del inframundo. Circe pregunta el significado de que le traigan un bebé al infierno, y Apolo responde que ella es la última de las Amazonas, ya que el resto de su gente ha sido castigada por sus crímenes contra Zeus, y Circe será su guardiana. Además, Circe recibe un nuevo decreto para su castigo: nunca puede pronunciar la palabra "Amazona" para que la niña no sepa sus orígenes. Obligada por Apolo, Circe intenta decir la palabra, pero descubre que el decreto se cumple. Apolo se despide y Circe le pregunta qué ocurriría si la niña muriera, a lo que Apolo responde con apatía que a los dioses no les importa.
A medida que pasan los años en el infierno, Circe y Diana logran convertir el páramo estéril y repugnante que llaman hogar en una morada cada vez más reconfortante y habitable. Circe usa su magia para proporcionar recursos y apoyo en la crianza de la niña precoz. Aunque inicialmente se muestra reacia, Circe se da cuenta una y otra vez de que la forma de enamorarse de un niño es criándolo. Con la edad llega la curiosidad, y Circe le enseña lo mejor que puede en su situación, impartiéndole la moral que conoce, las magias a las que pueden acceder y el sentimiento que tiene dentro de sí por una palabra que no conoce pero que guarda en su corazón. Al acercarse a la edad adulta, Diana se convierte en la protectora de Circe, habiendo perfeccionado sus habilidades sobrehumanas y convirtiéndose en una guerrera que Circe llega a comprender que debe dejar salir al mundo pronto.
De regreso en Gateway city, Diana le pregunta a un soldado si está a cargo. El soldado de infantería atónito apenas puede reunir una palabra para ella, simplemente señala con la cabeza en dirección a sus comandantes. Diana sigue su ejemplo y advierte que deben evacuar la ciudad de todos los civiles en un radio de una milla, ya que los Heraldos no están muertos por el simple hecho de estar aturdidos. Cuando un brazo enorme de un nuevo Heraldo se revela desde el objeto sobre Gateway city, una versión más monstruosa de los Heraldos, Harbinger Prime, llega para desafiar a Diana, quien anuncia firmemente que la bestia debe regresar de donde vino o ser enviada de regreso por la fuerza.
Los ojos de Harbinger Prime brillan mientras ordena a los Heraldos que se levanten, Diana comenta su consternación cuando los Heraldos caídos se ponen de pie y proceden a atacarla una vez más. El líder de los Heraldos intenta atacar a la princesa una y otra vez, pero no logra acertar sus ataques debido a su rapidez mientras lo rodea, luego usa sus aparatos ortopédicos para repeler el ataque directamente hacia Harbinger Prime, ya que el golpe en su propio rostro. La bestia enojada ataca a Diana otra vez, Diana sale volando hacia atrás por el ataque y aterriza abruptamente en otro lado de la playa.
Retrocediendo una vez más a la Isla Salvaje, Diana le pregunta a su madre cuál es la palabra que siente dentro de ella, una que sabe que es importante, una que tiene miedo de decir. Circe consuela a su hija, asegurándole que no le teme a la palabra, sino al cambio que la seguirá, y por eso le pide que diga la palabra que siente dentro de ella, Amazona.
Mientras Diana del presente se mantiene firme una vez más contra el poderoso Heraldo Supremo, la Diana que vemos al mismo tiempo del pasado le pregunta a Circe cuál es el significado de la palabra "Amazona", y Circe le responde que es simplemente lo que ella es, aunque aún no puede pronunciar la palabra. Con lágrimas en los ojos, se preguntan por qué los dioses hicieron de esta su vida. Circe explica que las Amazonas alguna vez fueron protectoras del mundo y que el mundo puede caer sin ellas. Obligada por su madre, Diana se proclama Amazona una y otra vez. La Diana del presente también lo proclama, y luego se acerca al Heraldo para anunciarle que mientras ella respire, este mundo no será suyo…
El universo Absolute sigue tomando forma con relatos sólidos, sorprendiendo gratamente con su propuesta. Hay que ir paso a paso, disfrutar de lo que se está haciendo bien y ojalá tener la sabiduría necesaria para gestionar bien los desarrollos futuros. ¿Será el universo Absolute un experimento con fecha de vencimiento, o terminará trascendiendo en algo más?... Sólo el tiempo nos dará las respuestas…
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