Reseñado por: JML
Edición original: Absolute Flash # 3 (May-2025)
Guión: Jeff Lemire.
Arte: Nick Robles.
Color: Adriano Lucas.
Portada: Nick Robles.
Guión: Contradictoriamente, la mayor virtud
y problema con los que ha debido lidiar Absolute Flash hasta este
momento ha sido su propio ritmo. Al intentar reflejar la mentalidad
del joven velocista titular, Jeff Lemire ha estructurado este
arco argumental de debut con una metodología de inmediatez caótica. Y
aunque resulta impactante e ingenioso, tras tres números hay que
reconocer que no siempre resulta del todo efectivo siendo que apenas
se empieza a establecer al protagonista y su mundo.
Si bien la narración se mantiene interesante,
quizás la lección más importante a relucir sea que no es necesario ir siempre
a máxima velocidad. La misma presencia de la estrafalaria versión
Absolute de Grodd desde este punto quizás sea el condimento extra necesario
para encontrar un punto de equilibrio que mantenga el impulso inicial
de cara a seguir desarrollando una historia digna de leerse.
Nota: 5,0.
Arte: El trabajo artístico de Nick Robles se
mantiene sólido, pero tal como la escritura, comienza a perder algo de
fuelle. Conceptualmente brillante y visualmente impactante,
al igual que el protagonista, la narrativa visual avanza demasiado rápido
para su propio bien, persiguiendo una suerte de vanidad estética que
simplemente no es tan interesante como la historia subyacente.
Como dice el meme, las cosas son buenas,
pero podrían ser mejor.
Nota: 6,0.
Historia: Wally West
regresa al pasado inmediatamente después del accidente. Huye del laboratorio,
pero Barry Allen sigue atrapado en su rayo y es arrastrado tras él, con la
carne desprendiéndose de sus huesos mientras muere en lenta agonía. Wally
finalmente deja de correr en el desierto y Barry, reducido a un esqueleto, pero
de alguna manera aún con vida, le ruega a Wally que lo ayude. Wally regresa al
presente y escapa de los Rogues. Corre a una granja aislada y se esconde en el
granero. Agotado emocional y físicamente, se desploma y se queda dormido.
De
vuelta en el desierto, el Capitán informa de lo sucedido al coronel Rudy West,
quien los monitorea desde Fort Fox con un grupo de científicos. Rudy insiste en
que traigan a Wally vivo y a salvo, y el Capitán le dice que han desplegado al
"mono". Un científico llamado Thawne muestra una transmisión de video
en vivo de Grodd, quien ha rastreado a Wally hasta el granero.
Wally
despierta y ve a Grodd, a quien reconoce del laboratorio de Barry, de pie junto
a él. Grodd extiende un dedo brillante y, intrigado, Wally roza las yemas de
sus dedos con las suyas. Esto establece un vínculo psíquico entre ellos y ambos
experimentan los recuerdos del otro, en particular la pérdida de sus madres de
niños: Wally cuando su madre murió de una enfermedad y Grodd cuando unos
cazadores la mataron y lo capturaron. Grodd le dice telepáticamente a Wally que
son iguales y lo consuela cuando Wally admite en sus pensamientos que tiene
miedo. Oyen un ruido afuera y, al salir a comprobarlo, ven un dron bumerán
volando directamente hacia ellos.
Wally y Grodd saltan para apartarse justo
cuando el bumerán dispara una ráfaga de energía al granero y lo destruye. Wally
ve el tanque de los Rogues dirigiéndose hacia ellos, sufre un ataque de pánico
y sus poderes se disparan, con rayos e imágenes residuales explotando de su
cuerpo al recordar la muerte de Barry y su visión del futuro. Sin embargo,
Grodd logra calmarlo telepáticamente y Wally recupera el control. Grodd deja
inconscientes a los Rogues telepáticamente, pero Harkness, misteriosamente, es
inmune. Se coloca una mochila propulsora y vuela hacia ellos con una flota de
drones. Wally se da cuenta de que ya no puede correr y, por una vez, tiene que
afrontar sus problemas. Carga contra Harkness a toda velocidad, salta y lo
derriba de un puñetazo. Grodd le dice a Wally que se vaya, pero Wally dice que
irán juntos. Wally y Grodd regresan al desierto, donde Wally toma el traje de
contención que Barry llevaba puesto y entierra su cuerpo. Piensa que la vida
que conocía ha terminado, pero esa comprensión le trae una sensación de calma y
libertad que no ha sentido en mucho tiempo. Se pone el traje de Barry, que se
vio usando en una de sus visiones, y corre hacia el horizonte…
Nota: 5,0.
Nota final: 5,3 (Chile) / 7,5 de 10 (Global).
Si bien el primer número fue tremendamente
interesante, no por nada el cómic mejor vendido de Flash en cuatro
décadas, completando este tercer número queda en evidencia que en
una perspectiva mayor Absolute Flash carece aún del equilibrio entre ritmo y
sustancia. Comparativamente a los otros títulos Absolute pareciese que la
profundidad y el desarrollo de los personajes se quedó estancado, cosa que
ojalá mejore en las próximas entregas por venir. Puedo ser muy aficionado a Flash,
pero no me puedo poner una venda en los ojos y negar que hasta el momento este ha
sido el punto más débil de este naciente universo Absolute. Queda el beneficio
de la duda para lo que está por venir…
De momento me despido, muchas gracias por
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Será hasta una próxima ocasión. Qué tengas
un excelente día. 😉
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