CINE / THE FLASH (2023) – WARNER BROS / DC STUDIOS

Reseñado por: JML
Dirigida por: Andy Muschietti.
Fecha de estreno: 16 de Junio de 2023 (USA)
Reparto: - Ezra Miller / Barry Allen – Flash.
          - Michael Keaton / Bruce Wayne – Batman.
          - Sasha Calle / Kara Zor-El - Supergirl.
          - Michael Shannon / General Zod.
          - Ron Livingstone / Henry Allen.
          - Maribel Verdú / Nora Allen.
          - Kiersey Clemons / Iris West.
          - Antje Traue / Faora-Ul.
          - Ben Affleck / Bruce Wayne - Batman.
          - Gal Gadot / Diana Prince – Wonder woman.
          - Jeremy Irons / Alfred Pennyworth.
          - Saoirse-Monica Jackson / Patty Spivot.
          - Rudy Mancuso / Albert Desmond.
          - Sanjeev Bhaskar / David Singh.
Duración: 144 minutos.
Presupuesto: U$ 220.000.000.-

Recaudación: U$ 271.333.313.-
 

 
 Tras una larga espera, que se fue alargando cada vez más en el tiempo, considerando que originalmente este film iba a ser estrenado en 2018, ayer por la noche por fin pude ver el film The Flash. Les soy honesto en confesar, que, por diversos motivos, probablemente sea la reseña para la sección de cine más difícil que me ha tocado hacer en los más de 12 años de vida del blog. Partiendo por el hecho que casi toda la vida he sido un aficionado a Flash, mi primer contacto con el personaje fue a los 7 años de edad, con la serie televisiva protagonizada por John Wesley Shipp, allá por el cada vez más lejano 1990. Ver la serie despertó mi interés por los cómics, y comencé a coleccionar la clásica Flush man de editorial Perfil. Al sumergirme en el mundo de los cómics comprendí sobre el legado de Flash. Por las cosas de la vida, de todos los velocistas, Wally West se convirtió en mi favorito, debido a que crecí leyendo sus aventuras y me vi reflejado en él en el aspecto de aprender de los errores para ser una mejor persona, a diferencia de los Flash previos, Jay Garrick o Barry Allen, que siempre fueron algo más empaquetados e intachables. En los cómics, cada Flash tiene su personalidad bien definida. El punto es que, rápidamente comprendí con el hecho que el Flash de John Wesley Shipp amalgamaba aspectos de los tres primeros Flash de los cómics, que las adaptaciones fuera de las viñetas son sólo eso… adaptaciones. No deben ser un calco, por ende, siempre hay que tener la mente abierta.
 

 Siendo un aficionado a Flash, desde luego que un film en solitario del personaje era algo que me resultaba sumamente excitante y atractivo. Para el caso, no iba a ser algo totalmente nuevo, pues ya estaba el Flash pre establecido del DCEU, un Barry Allen interpretado por Ezra Miller, que desde un inicio fue bastante divisivo, con una recepción bastante mixta entre fans y críticos, ya fuese por su aspecto o actitud, sin mencionar por los múltiples problemas en la vida personal del actor. Pero volviendo al punto anterior, es sólo una adaptación más del personaje. El condimento extra al caso fueron temas anexos a la producción del film en lo que supone el asunto del universo compartido. Como bien sabemos, de un tiempo a esta parte, los grandes estudios han puesto sus fichas en los universos compartidos. En el caso de Warner Bros y DC comics, el DCEU nunca logró asentar bases firmes. Durante su trayectoria ha cojeado bastante, con muchos fallos, y pocos aciertos. Sumado a que entremedio Warner Bros se fusionó con Discovery, la nueva administración cortó por lo sano y tomó a la decisión de darle fin al DCEU – que le quedan dos películas más por delante, Blue Beetle y Aquaman and the Lost Kingdom -, para dar inicio a un nuevo universo compartido, el ahora simplemente denominado DCU, con James Gunn y Peter Safran capitaneando. Se fundó DC Studios, que tomó la batuta de DC Films, lo que conllevó a que el film The Flash fuese bastante manoseado con la finalidad de servir al propósito de hacer la transición del DCEU al DCU. Vale decir, un soft reboot, donde se ha confirmado que el DCU conservará algunos aspectos y actores del DCEU.
 

 Con estos antecedentes, desde luego que todo lo relacionado a este film causó hype, polémica y rechazo, a partes repartidas. El ambiente previo generado fue demasiado enrarecido. DC venía de dos fracasos previos con Black Adam y Shazam!: Fury of the Gods. La gente sentía frustración por apoyar a un film de un universo que está condenado. Para apalear el asunto, James Gunn salió con toda su parafernalia a clarificar cada decisión creativa tomada. Además, con una confianza inusitada, Warner Bros estrenó el film dos meses antes en la CinemaCon 2023. Surgieron halagos de todo tipo, de celebridades como Tom Cruise o Stephen King, que elevaron el hype para vendernos la pomada que The Flash era la salvación de DC en los cines. Se impuso un buen trabajo de condicionamiento mental para hacernos creer de antemano que el film establecería la reestructuración definitiva de DC en el cine, a la vez de ser una de las mejores películas de superhéroes de la historia. ¿Logró las expectativas o nuevamente nos vendieron humo?... Lo cierto es que las opiniones siempre serán subjetivas, aquí les dejo mis impresiones tras un primer visionado del film…
 

 
Nota: 5,0 (Chile) / 7 de 10 (Global).
 Hay bastante para desgranar, así que comenzaré con algo que de seguro has escuchado o leído en otros lados; el CGI no es bueno y la banda sonora no es de las mejores. Sobre el CGI, el director Andy Muschietti ha afirmado recientemente que los efectos fueron elaborados como si estuviesen inacabados adrede, para figurarnos una visión “distorsionada” de las cosas, tal cual como la tiene Barry cada vez que usa sus poderes. ¿Explicación válida o excusa?... El traje de Flash me produce sensaciones encontradas. En algunas tomas luce genial, y en otras me hace añorar el traje previo de Justice League.
 Argumentalmente hablando, la película es entretenida y bastante comiquera. Quizás un poco más larga de lo que debería. A pesar que me entretuvo, debo decir que no cumplió a cabalidad con mis expectativas, esperaba otra cosa, algo más. Más arriba decía que hay que entender que las adaptaciones son adaptaciones, pero no por eso hay que conformarse con lo que sea. La narrativa toma inspiración del cómic Flashpoint, un evento que fue ideado para generar un cambio en el universo DC de los cómics, que valga decir, al igual que esta película, fue entretenido, pero no fue el mejor de los eventos. Memorable por sus consecuencias, sobre todo. Al parecer, en este caso el film estará destinado a ser más memorable por sus polémicas, que por su contenido.
 

 Hablando netamente del film, si bien de antemano sabíamos que habría muchas “estrellas invitadas”, afortunadamente sí es un film de Flash por sobre todas las cosas. Ezra Miller hace un buen trabajo desdoblándose en dos versiones diferentes de Barry Allen, una más “madura” y otra “más alocada”. Basándome sólo en lo actoral, y no en los escándalos de Miller, puedo decir que no es mi versión live-action favorita de Flash, pero al menos se mantiene parejo en el desarrollo del personaje en el DCEU. Los secundarios; Michael Keaton (Batman), Sasha Calle (Supergirl), Michael Shannon (Zod), Ben Affleck (Batman), aparecen menos de lo pensado y son un buen apoyo para la historia en sus interacciones en cuanto a los diferentes momentos de la trama. Hay muchos cameos y sorpresas que, dependiendo del criterio del espectador, pueden ser tanto un regalo para los fans de DC, así como algo de lo más irrelevante. Sin caer en spoilers, sólo diré que con dos versiones de Barry Allen obviamente se crea una paradoja temporal, que, cuando todo está perdido, encuentra su resolución con un momento muy deux ex machina. Sin embargo, algo que me pareció notable y bien explicado es el tema del multiverso, ofreciendo una explicación válida para el realineamiento de los universos, y, por consiguiente, el cambio de actores. Vale decir, un pase gol al DCU de James Gunn.
 

 En conclusión, The Flash no es un film perfecto, tampoco una bazofia. Mucho mejor de lo que DC venía haciendo últimamente, pero lejos de ser uno de los mejores films de superhéroes de la historia. Andy Muschietti le puso bastante corazón al asunto, sin duda haciendo lo mejor que pudo a pesar de las circunstancias, con un actor protagonista complicado y cambios administrativos constantes. Eso demuestra temple y profesionalismo. Valga mencionar que precisamente ayer se oficializó que Muschietti dirigirá el reboot de Batman en el DCU, el film The Brave and the Bold. Al menos aquí ya obtuvo experiencia dirigiendo a dos Batman.
 Respecto a la crítica especializada, The Flash debutó con un 73% de aprobación en Rotten Tomatoes, al momento de escribir este artículo ha bajado hasta un 68%. Las proyecciones de taquilla han variado constantemente debido a las polémicas que han rodeado al film, principalmente el factor Ezra Miller. Además, con el fluctuante mercado post-pandemia actual, las previsiones suelen no ser del todo certeras. Vale decir, de momento es un misterio saber cuánto terminará por recaudar el film. Se ha dicho que si le va bien económicamente podríamos tener una secuela en el contexto del DCU. Si me preguntan a mí, así como Warner pasó página con Henry Cavill y Ben Affleck, también deberían pasar página con Ezra Miller… Nuff Said!!!
 

 Antes de finalizar, recordar que este artículo sólo corresponde a un análisis y crítica personal del film, siempre lo recomendable es verlo por ti mismo para que así puedas formar una opinión propia. Sin más que añadir, muchas gracias por tu visita. Si gustas de este blog puedes seguir sus novedades mediante las redes sociales, en Facebook o Twitter, donde además podrás encontrar diversas novedades relacionadas al mundo del cómic.
 
 Será hasta una próxima ocasión. Qué inicies un excelente fin de semana. 😉