Reseñado por: JML
Edición original: The Flash # 75 (Abr-1993)
Guión: Mark Waid.
Dibujo: Greg LaRocque.
Tintas:
Roy Richardson.
Color:
Matt Hollingsworth.
Portada: Ty Templeton.
Guión: Habiendo disipado
las dudas sobre la identidad de Barry Allen, sumado al reciente regreso de Jay Garrick, nos encontrábamos con tres generaciones de Flash juntos en un
mismo período temporal, lo que era algo totalmente inédito en el momento de publicarse este cómic, tres décadas atrás. Previamente, cada Flash tuvo su propia época para destacar
como el hombre más veloz con vida. Sabiendo que siempre hubo una relación
bastante cordial entre los
velocistas, más aún entre Barry y Wally, siendo Barry tío y mentor de Wally, aparentemente
todo sería miel sobre hojuelas, pero…
En un rápido giro de los acontecimientos, la sombra de la duda vuelve a recaer sobre
la figura del reaparecido Barry Allen. Como lector de la época, a sabiendas
de lo leído en el número anterior, ahora la duda a
instaurarse no era sólo si este Barry
Allen era un impostor… ¿Qué tal
si el Barry Allen verdadero se había
convertido en un mal tipo?... Mark Waid juega bien con los elementos a su
favor para ofrecernos un relato destinado a hacer historia en la mitología de
los Flashes. Sin duda, una lectura
trascendental para todo buen
aficionado a estos personajes.
Nota: 6,0.
Arte: El arte de
Greg LaRocque funciona de perillas, estando a la altura de las circunstancias.
Como destacaba en la reseña anterior, LaRocque
tiene la virtud de hacer identificable a cada Flash por sus propios méritos
visuales. Evidentemente con Jay
Garrick no hay problema, pero algunos artistas ilustran demasiado parecidos a Barry y Wally.
Afortunadamente aquí ese no es el caso, teniendo LaRocque el detallismo de las sutilezas visuales, más allá de las
diferencias estéticas más evidentes.
A destacar que la portada de este número es obra de Ty Templeton.
Nota: 6,0.
Historia: Wally West y Jay
Garrick vuelven a formar equipo, esta vez para evitar que los soldados de alta
tecnología del Combinado roben un tren del Banco de la Reserva Federal. Sin
embargo, el ataque hace que el tren se salga de control, lo que posiblemente
provoque un accidente peligroso en Keystone city. Sólo con la ayuda adicional
de Barry Allen, Wally y Jay logran detener el tren y salvar a los ciudadanos.
Más
tarde, Wally habla con su novia Linda Park sobre cuánta atención atrae Barry
Allen del público. Para Linda parece obvio que Wally está un poco celoso y, por
ello, sugiere que debería buscar un nuevo nombre para su identidad de
superhéroe. Pero sus ideas se quedan bastante cortas, al menos en opinión de
Wally. Cuando Wally recibe una llamada de Jay Garrick, se marcha
inmediatamente, porque la policía afirma haber identificado un escondite de
Combinado.
Antes de correr al almacén mencionado, Wally busca a Barry Allen y rápidamente lo encuentra en el callejón donde Barry se volvió a materializar recientemente. Barry todavía se siente desorientado a veces y espera encontrar algunas respuestas sobre su misterioso regreso en esa misma calle. Pero poco después, ambos se encuentran con Jay Garrick en el escondite de Combinado. Mientras los tres todavía están discutiendo una posible trampa, los soldados del Combinado ya se escapan y atacan con artillería pesada. Jay queda rápidamente incapacitado y después de que Wally queda enterrado bajo una montaña de escombros, un soldado Combinado ya celebra haber matado a Flash. Sin embargo, esto provoca un arrebato de ira por parte de Barry Allen y Wally, que logró liberarse de los escombros, apenas puede detener a su mentor antes de que hiera al soldado responsable o incluso lo mate. Pero mucho peor es que Wally escuchó claramente cómo Barry gritaba algo directamente en la cara del soldado… "¡Yo soy Flash!"…
Nota: 6,0.
Nota: 6,0.
Nota: 6,0.
Antes de correr al almacén mencionado, Wally busca a Barry Allen y rápidamente lo encuentra en el callejón donde Barry se volvió a materializar recientemente. Barry todavía se siente desorientado a veces y espera encontrar algunas respuestas sobre su misterioso regreso en esa misma calle. Pero poco después, ambos se encuentran con Jay Garrick en el escondite de Combinado. Mientras los tres todavía están discutiendo una posible trampa, los soldados del Combinado ya se escapan y atacan con artillería pesada. Jay queda rápidamente incapacitado y después de que Wally queda enterrado bajo una montaña de escombros, un soldado Combinado ya celebra haber matado a Flash. Sin embargo, esto provoca un arrebato de ira por parte de Barry Allen y Wally, que logró liberarse de los escombros, apenas puede detener a su mentor antes de que hiera al soldado responsable o incluso lo mate. Pero mucho peor es que Wally escuchó claramente cómo Barry gritaba algo directamente en la cara del soldado… "¡Yo soy Flash!"…
Nota: 6,0.
Ya lo había dicho previamente, las cosas a partir de este número comienzan a crecer en una espiral de intensidad constante… Progresivamente, cada pieza iría cayendo en su sitio; en este mismo número hay una pista importante en la secuencia en que Wally encuentra a Barry en el callejón, quizás imperceptible en primeras lecturas, pero que después cobraría sentido. En próximas reseñas sigo comentando este arco argumental tan trascendental para los Flashes.