Reseñado por: JML
Edición original: Uncanny X-men # 600 (Nov-2015)
Guión: Brian Michael Bendis.
Arte: Sara Pichelli, Mahmud Asrar, Stuart Inmonen, Kris
Anka, Chris Bachalo, David Marquez, Frazer Irving.
Tintas: Wade Von Grawbadger, Tim Townsend,
Mark Irwin.
Color: Marte Gracia, Jason Keith, Chris
Bachalo, Frazer Irving.
Guión: Con este comic
por fin se le pone cierre a la era Bendis en la franquicia mutante. Un período
que ha durado tres años; en un principio con muy buena pinta en ambas series
que tenía a su cargo – All-new X-men y
Uncanny X-men – las cuales manejaban por separado premisas sumamente
interesantes. Pero a mitad de camino la cosa se fue desinflando paulatinamente
cayendo en un abismo que nos ha llevado a este punto donde hay regresiones y
consecuencias.
Regresión en el sentido que Cíclope ha tomado
caldo de cabeza y ha retomado la senda de la paz, dándole a entender al mundo
que no tienen nada que temer de los mutantes. La famosa revolución de armas
tomar ahí no más quedó sin ser desarrollada de manera efectiva por Bendis. Una
oportunidad desperdiciada de contar buenas historias, desperfilando a Cíclope
nuevamente y dejándolo como un tipo indeciso que cambia de opinión y de bandos
cada vez que le entra en gana. A mi modo de ver, si bien es un luchador apto
con excelente manejo de estrategias, no tiene la pasta para ser el líder de
nadie, menos de una revolución. Viéndolo por el lado más emotivo, todos podemos
cambiar – aunque sea bastante seguido
– y al menos Scott ha demostrado que las enseñanzas de Xavier no han sido en
balde, a pesar de todos los costalazos que se ha pegado en el camino.
Consecuencias por el lado de Bestia. Sus
acciones le han pegado duro a sus colegas mutantes, inclusive más duro que si
se tratase de un villano. Los X-men originales se han quedado en el presente de
manera indefinida, mientras que él no es capaz de asumir sus propias culpas, enfocando
sus emociones al achacar culpas a Ciclope en el sentido de enmendar los errores
de él a través de mandarse más cagadas. Claro ejemplo: trastocar el
espacio-tiempo o la genética. La naturaleza de la gente a veces no cambia, y en
contraste a Cíclope, el mensaje definitorio que Bendis nos ha dejado sobre
Bestia como personaje es que está destinado a cagarla aunque sea con las
mejores intenciones del mundo.
Este número # 600 se queda corto a la hora de
hacerle justicia a un número de aniversario, pero siguiendo la tónica de Bendis
por su paso por la franquicia, nos demuestra que el chicle se puede seguir
estirando hasta volver al mismo punto de partida. Tres años de historias que en
perspectiva han quedado en nada que valga la pena recordar.
Nota:
4,0.
Arte: Para este número
especial - que cuenta con el doble de
páginas - Bendis se ha hecho acompañar de todos – o gran parte – de los artistas que le acompañaron por su paso en
ambas cabeceras mutantes los pasados tres años.
En el plano general, hay buen oficio y
calidad. Las transiciones de un artista a otro no molestan pues están bien
encajadas en medio de flashbacks y las diversas situaciones planteadas a lo
largo del comic.
En el apartado de las portadas este número
conmemorativo cuenta con bastantes de ellas, las cuales van avocadas a las
diferentes formaciones de los X-men a través de su trayectoria. Por asuntos de
espacio he agregado tan sólo algunas de las que me han parecido más notables en
este artículo.
Nota:
6,0.
Historia: Escuela Jean
Grey. Bestia se encuentra trabajando en su laboratorio cuando recibe una
llamada de Tormenta, quien le dice que le necesitan en la cafetería. Una vez
llega allí, el lugar se encuentra repleto de todos quienes forman parte de la
escuela: alumnos, profesores… X-men.
Se trata de una especie de intervención, pero
una vez que sus amigos comienzan a plantearle los asuntos en cara Bestia se
percata que más bien es un enjuiciamiento. Lo culpan por romper leyes de la
física, leyes de la genética e inclusive la continuidad del espacio-tiempo de
una manera egoísta, solitaria y sin siquiera consultarle a los demás. Cosas por
las que no muestra un mayor arrepentimiento. Tormenta clama que los crímenes
que ha cometido merecen encarcelamiento, pero antes que llamar a S.H.I.E.L.D.
prefieren arreglar sus asuntos en casa.
Pese a todos los antecedentes dados, Bestia no
es capaz de asumir sus culpas y elude sus responsabilidades sacando como
ejemplo lo que ha sucedido con Cíclope y el desviado camino que ha tomado, del
cual nadie le anda persiguiendo. Tormenta indica que a quien quieren ayudar es
a él y no a Scott, pero esto no será posible a menos que él genuinamente acceda
a ser ayudado. Bestia se va del lugar pero los X-men no tienen tiempo de
seguirlo pues la alarma de Cerebro se activa a causa de un disturbio ocurrido
en Washington DC.
Magik les teletransporta hasta Washington DC
donde se encuentra Cíclope en plena conferencia de prensa explicando bien de
que se trata la “revolución mutante”. Es un acto revolucionario en el sentido
que pueden congregarse juntos y en paz ante el mundo sin hacer daño a nadie. No
precisamente un acto de guerra o algo por el estilo. Magneto aparece en el
lugar uniéndose a Cíclope y dándole a entender al mundo que no tienen nada que
temer de ellos. Eric le susurra a Scott que Xavier se hubiera sentido orgulloso
de este camino que está tomando.
En la escuela, Eva Bell va a hablar con Bestia
diciéndole que ha viajado tres veces en el tiempo y en esas tres veces supo que
habría un juicio importante para él, el cuál debía experimentar. Ahora que las
cosas han cambiado nuevamente y se ha evitado la revolución violenta de
Cíclope, Eva le pregunta a Bestia qué será lo siguiente que hará… Él se marcha
de la escuela tras oír estas palabras.
Nota:
4,0.
Nota
final: 4,6 (Chile) / 6,5 de 10 (Global).
En medio de los flashbacks de este número
se resuelven algunas situaciones de cara a lo que sigue, y que de seguro
seguirán siendo tratadas por los equipos creativos que tomen la posta tras la
salida de Bendis.
Primero, tenemos a Coloso reconciliándose con
su hermana Magik, con Kitty Pride como mediadora. Respecto a ello me llama la
atención que no se nota a una Kitty tan enamorada de Star-Lord al hablar con su
ex-novio. Siempre da esa sensación de que Kitty y Coloso terminarán juntos sea
lo que sea que pase de por medio.
Se resuelve el misterio de la homosexualidad
de Iceman en el sentido de que su versión más joven es abiertamente gay. La
verdad de las cosas es que el Iceman adulto también es gay y lo ha ocultado por
el hecho de no cargar con dos cruces: ser mutante y gay.
Finalmente los X-men originales han aceptado
su destino en el presente y vivir sus vidas sin estar condicionados por lo que
“debería ser”. Ya sea por ello o no, Jean se decide a estar Bestia en lugar de
Cíclope.
Lo positivo del caso es que tras este número
ya no hay más Bendis, a la expectativa de lo que serán las series mutantes en
el período All-new All-diferent Marvel. Ya sabemos que los personajes con la X
no la tienen fácil en la actualidad con Marvel dándoles prioridad a los
personajes que pueden llevar al cine. Si bien en su caso no han sido tan
extremos como lo fue con los 4 Fantásticos – que los sacaron del mapa ubicando
a algunos de sus personajes en otras series -, todo lo que suceda de aquí en
más genera dudas en base a este contexto.
Sólo resta a decir, a esperar y experimentar
el futuro…
Me despido. Por mi parte misión cumplida tras
reseñar todos los comics de Bendis en las series mutantes. Como experiencia
personal puedo decir que fue de dulce y agraz. Nuff said.
Que tengas un buen fin de semana.
Saludos.
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