Reseñado por: JML
Edición original:
Uncanny X-men # 129 a 137 (Ene-1980 / Sep-1980)
Guión: Chris Claremont.
Dibujo: John Byrne.
Tinta: Terry Austin.
Guión: Chris Claremont en un continuo
estado de gracia y creatividad a fines de la década de los ’70 e inicios de los
’80, nos brinda este épico relato que sería uno de los puntos decisivos en la
historia de los X-men. Si bien ya hacia un tiempo que Jean Grey había
manifestado los poderes cósmicos de la entidad conocida como Phoenix, en
esta historia contemplaríamos todo el poder de su lado oscuro, haciendo eco del
viejo adagio "el poder absoluto corrompe
absolutamente”.
La historia pasa por diversas fases comenzando
con un encuentro con el Hellfire club que busca convertir a la poderosa Jean en
su reina negra. Contemplando entre otras cosas primeras apariciones de
personajes trascendentales como Kitty Pride o Dazzler, la experiencia de tener
a Mastermind en su mente haciéndose pasar por Jason Wyngarde hace que el poder
oscuro del Phoenix comience a manifestarse en Jean rompiendo toda barrera que
ella erigió para contenerlo. Phoenix oscura termina por manifestarse de mala
manera destruyendo un sistema planetario y haciéndola enfrentar a sus amigos. Cuando
todo parece estar bien los Shi’ar aparecen para juzgarla y la tragedia queda
servida.
Todo un clásico, si no lo has leído aún te lo
recomiendo mucho, en especial si gustas de Marvel y los mutantes.
Nota:
7,0.
Arte: Un John Byrne aún novedoso y en
excelente forma, secundado en las tintas de un grandioso Terry Austin, nos
regala excelentes momentos que han quedado y quedaran en la retina del afacionado por
siempre. El episodio en que Wolverine lucha solo para rescatar a sus compañeros
en la mansión del Hellfire club – Uncanny X-men # 133 - es todo un clásico, que a criterio personal – que ya me considero un estudioso más que un fan de los cómics – fue
el momento decisivo en que se comenzó a explorar el potencial individual del
personaje ratificando el favor de quienes pedían más de él. Vale decir, el
amigo Byrne le hizo un grueso favor al personaje de paso a la gran popularidad que fue cosechando.
Y para que vean como son las cosas hoy en día pasa lo contrario, que mucha
gente se queja de la sobreexposición de Wolverine, que debe ser el personaje
que tiene más apariciones mensuales en los títulos de Marvel.
Volviendo al tema, excelente trabajo de Byrne,
que va mejorando número tras número.
Nota:
7,0.
Historia: En el universo Marvel, Phoenix
es una entidad cósmica psiónica vinculada a la mutante Jean Grey. La primera
vez que Phoenix se manifestó en Jean fue cuando los X-men regresaban de una
misión en el espacio y brevemente alcanzó su máximo potencial como telépata y
telequinética para salvar a sus compañeros de la muerte.
En ese momento, Jean se convirtió en un ser de
pensamiento puro, y luego al regresar a la Tierra cambió su traje e identidad a
semejanza de un Phoenix. Fue con este increíble poder que Jean reparó una fractura
en el cristal M’Kraan - del imperio Shi’ar -, pero voluntariamente
restringió sus poderes después, con el fin de mantenerlos bajo control.
Su enorme poder y potencial la convirtió en
objetivo para el mutante ilusionista Mastermind, quién buscaba la aceptación
necesaria para integrar el círculo interno del Hellfire club. Con la ayuda de
un dispositivo creado por la reina blanca, Emma Frost, fue capaz de proyectar
sus ilusiones directamente dentro del cerebro de Jean, seduciéndola con el
alias de Jason Wyngarde. Estas ilusiones le hicieron creer que revivía
recuerdos de una antepasada de nombre Lady Grey, que era amante de Jason
Wyngarde. Phoenix se unió al Hellfire club como su reina negra, un papel
decadente, que le hizo saborear los extremos de la miseria humana. Las barreras
que erigió para contener su poder, se debilitaron poco a poco.
Cuando los X-men acuden a su rescate, son
capturados por el círculo interno a excepción de Wolverine. Mientras Wolverine
lucha solo contra los soldados del Hellfire club - en el clásico Uncanny X-men # 133 -, el verdadero amor de Jean,
Cíclope (Scott Summers) se bate en un duelo psíquico con Mastermind. La imagen
psíquica de Cíclope muerto hace que las barreras de Phoenix se destruyan,
liberando su verdadero poder. Con su poder al máximo y luego de toda la
decadencia y maldad que experimentó, se rebautiza a sí misma como “Phoenix
oscura”, y le hace pagar a Mastermind, mientras los miembros del Hellfire club
como Sebastián Shaw y Emma Frost huyen.
Los X-men le hacen frente y son fácilmente
derrotados, tras lo cual Phoenix oscura parte hacia el espacio. Intentando
saciar su hambre de poder, Phoenix oscura crea un agujero de gusano y se
transporta a sí misma a una galaxia lejana. Sin pensar en las consecuencias, se
zambulle en el corazón de la estrella D’Bari, provocando que alcanzase el
estado de nova, matando a su paso a millones de vidas inocentes de aquella
galaxia. Entonces Phoenix oscura es atacada por un crucero espacial Shi’ar con
el fin de evitar la destrucción de más galaxias. Phoenix oscura acaba
fácilmente a sus atacantes, eso sí que antes de ser aniquilados alcanzan a
avisar a la emperatriz Shi’ar Lilandra sobre la amenaza. Lilandra convoca a un
encuentro entre diversas razas intergalácticas, entre ellas los pueblos Kree y
Skrull, tras lo cual concluyen que la amenaza de Phoenix oscura es mayor aún
que la del devorador de mundos Galactus y debe ser destruida de inmediato.
Mientras en la Tierra, el otrora hombre X
Bestia - por ese tiempo Vengador -
asiste a sus derrotados amigos. Bestia había construido un artefacto que podía
contener el poder de Phoenix oscura el tiempo suficiente como para poder
derrotarla. Phoenix oscura regresa a la Tierra, al hogar de la familia de su
anfitriona Jean Grey, y subsecuentemente es atacada por los X-men. Durante una
feroz batalla psíquica con su antiguo mentor Charles Xavier, este es capaz de
disminuir el poder de Phoenix oscura a un nivel razonable para que Jean pueda
recuperar el control nuevamente y disminuir sus impulsos destructivos.
Entonces los X-men junto a la recién
recuperada Jean son abducidos por el imperio Shi’ar, que les cuentan del
genocidio casual cometido por Phoenix oscura, por el cual Jean debe ser
condenada a muerte por ello. Xavier, quien estuvo involucrado románticamente con
la emperatriz Shi'ar, Lilandra la desafia a “Arin'n Haelar”, un duelo Shi'ar de
honor que no puede ser rechazado, para salvar la vida de Jean. Después de
consultar con sus aliados, estos acceden al duelo el cual sugieren amañar a su
conveniencia.
Al día siguiente los X-men hacen frente a la
guardia imperial Shi’ar , liderada por Gladiador en el área azul de la luna por
la vida de Jean y por ende el destino de Phoenix. Los X-men dan buena batalla,
pero son irremediablemente derrotados, quedando sólo Cíclope y Jean en pie.
Cuando un rayo de energía golpea a Cíclope, Jean se desespera y libera
nuevamente a Phoenix. En este punto, Lilandra ordena accionar el plan Omega,
destruir todo el sistema solar con la esperanza de eliminar a Phoenix oscura en
el proceso. Con todo fuera de control, Xavier ordena a los X-men detener a Jean
antes de que Lilandra accione el plan Omega. Dan batalla hasta que Jean
recupera la cordura, Jean es desintegrada luego por un arma Kree, pudiendo
antes despedirse de Cíclope. Más tarde, Cíclope descubre que Jean había
planeado sacrificarse desde que pisaron la luna…
Esta historia termina con Uatu, el vigilante
diciendo: “Jean Grey pudo haber vivido
como un Dios, pero para ella fue más importante morir como una humana…”
Nota:
7,0.
Nota
final: 7,0 (Chile) / 10 de 10 (Global).
Excelente historia, que ha sido plasmada
también en otros medios fuera de las viñetas, en manera animada dentro de X-men: the animated series (1992), Wolverine y
los X-men (2009) o en el cine en X- men 3: La batalla final (2006). Junto con Días del futuro pasado, la saga de Phoenix oscura se ha convertido
al paso del tiempo en una de las dos colaboraciones más imperecederas e importantes de
la dupla Claremont / Byrne.
El final de esta historia causó una controversia editorial pues Claremont y Byrne querían dejar vivir a Jean con la idea de usarla en futuras tramas, sin embargo, el editor en jefe de aquel entonces, Jim Shooter, decidió matarla pues un crimen tan grande como genocidio merecía un castigo ejemplar. Finalmente se llegó al final en que Jean se suicidó, lo que a su vez produjo una ruptura en el equipo creativo entre Claremont y Byrne, con la marcha del segundo al poco tiempo. Ya es legendario y conocido en el medio del cómic el mal humor y tozudez de Byrne cuando algo le parece mal. Cosas del mundo del cómic…
Muchas gracias por tu visita.
Saludos, qué tengas un muy buen día. 😉
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