Reseñado por: JoPeK
NOTA: Cada
uno tiene una historia particular con un comic, ya sea porque pasó una travesía
para conseguirlo, se lo regaló alguien especial o por millones de cosas más,
ante ustedes hago mi particular cuento de las historias que rodean mis
revistas.
Esta no es una historia de un comics en
particular, pero sí de la convención más grande del mundo, Comic Con, en su
versión chilena. Tres días llenos de actividades y expositores para todos los
gustos, obviamente, relacionado con el universo ñoño.
Pero
antes de continuar, aclarar que esta reseña es sólo del día sábado, día en que
pude asistir.
Estaba sin empleo cuando vi los comerciales de
la Comic Con Chile, sin dinero, de alguna manera me las tenía que ingeniar para
poder asistir. De repente, la sorpresa, Mega era uno de los patrocinadores
oficiales del evento, así que llame inmediatamente a mi amiga que trabaja allí,
le conté la situación y ella me dijo que sin ningún problema me conseguía un
par.
Pasaron los días y no tenía noticias de mi
amiga, pensé que se había olvidado de mi pedido, pero el miércoles de la semana
del evento, me llama y me cuenta donde tenía que ir a buscar las entradas. Ya
con los pases en la mano, no hallaba la hora que llegara el sábado, día valido
de los tickets.
Cuando llegué, me sorprendí del entusiasmo que
reinaba en el ambiente, para todos era una enorme fiesta ñoña, en donde los
superhéroes y personajes variados, se paseaban como Pedro por su casa,
respondiendo a cada petición de foto de los múltiples asistentes al evento.
Con la lluvia que caía sobre la capital, pensé
que la gente no asistiría en grandes cantidades, pero me tuve que tragar todo
lo que mi mente había elaborado.
Las celebridades extranjeras invitadas, cada
uno respondiendo a las actividades que realizaban y a sus fanáticos. El único
problema, es que por ejemplo, que Norm Breyfogle te hiciera un dibujo y te
autografiara el mismo o un comics, había que hacer una fila de tres horas,
debido a la cantidad de gente, para Billy Dee Williams, era similar o más. Sólo
Peter Facinelli estuvo en el escenario (este día) para el deleite de sus fans,
que era una cantidad enorme de adolescentes.
En un momento del día, era imposible caminar,
las filas y las personas caminando de allá para acá, hacía que el
desplazamiento fuera muy complicado. Eso marcaba el gran entusiasmo por
disfrutar de evento.
En cuanto a los stands presente, todos tenían
algo que aportar, ninguno, a pesar de su tamaño, se quedaba pequeño antes las
exigencias de los asistentes, que pedían algo relacionado con los comics.
En cuento a los superhéroes, los Avengers
tomaban, claramente, la delantera, con un stand sólo para ellos, con tres
estatuas tamaño natural de sus principales figuras, Iron Man, Capitán América y
Thor. Su moda, gracias a la película, también se veía en otras partes, las
tiendas tenían en sus vitrinas, comics de Los Vengadores, figuritas, posters y
muchas cosas más, todo para llamar la atención de los más pequeños.
En cuanto a los cosplay, Capitán América, Iron
Man y Thor, eran los disfraces más abundantes en el lugar, desde los grandes, a
los más pequeños.
Los ilustradores, hacían lo suyo, mostrar sus
mejores trabajos a los asistentes a la Comic Con Chile. Con espectaculares
trazos, daban cátedra en todos sus sentidos.
Sobre las tiendas, estás, por muy preparadas
que estuvieran, la gente parecía desbordar todos sus límites, ya que todos
quería una revista.
Cabe destacar la presencia de Unlimited, la
editorial que nos has hecho felices a todos los fanáticos de los superhéroes
chilenos, que tenía una cantidad impresionante cantidad de títulos para todos
aquellos que quisieran uno. Debo reiterar la cantidad de revistas que tenían a
disposición, increíble.
Todo dentro de lo esperado, como asistente,
quede muy conforme con lo que vi y gratamente sorprendido por la cantidad de
personas que fueron. Es de esperar que cosas así se sigan haciendo, porque en
Chile, por mucho que digan lo contrario, hay público para este tipo de eventos,
hay cultura pop, y lo más importante, hay amor por el comic.
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