Reseñado por: JML
 Edición original: Savage
Dragon # 53 (Sep-1998)
 Guión y arte: Erik Larsen.
 Color: Reuben Rude,
Abel Mouton, Lea Rude, Bill Zindel.
 Portada: Erik Larsen.
 
  
 Guión: Como todo buen número de Savage Dragon que
se precie, pasan muchas cosas simultáneamente en este cómic, de a ratos
quedando latente esa sensación de masticar mucho y tragar poco.
  Por tercer número consecutivo tenemos a
She-Dragon protagonizando el cómic en portada, sin embargo, en el
interior podemos percatarnos que el protagonismo está compartido por varios
de los habituales secundarios en ausencia del personaje titular. Mientras
sigue con su habitual línea de humor e ironía
entremezclada con descarados pastiches y homenajes, Erik
Larsen adorna su narrativa con problemas divinos y desilusiones
amorosas. Quizás lo más interesante que nos ofrece este número es el
enterarnos del hecho que Dragon no se ha ido para siempre, ha encontrado
una manera de sobrevivir, lo que se vería explicado con más detalles en próximas
entregas.
Entretenida lectura, sin embargo, no apta para un publico transversal. Hay que tenerle simpatía a Larsen y su obra para disfrutarla a full.
Nota: 5,0.
 
  
 Arte: Como encargado del arte de su propio cómic, Larsen
maneja toda la narrativa visual acorde a su estilo personal, con una escasa
curva de evolución al paso del tiempo. Muletillas y gags visuales
recurrentes, exageración en la acción y anatomía de los
personajes, que tal como en el caso de la escritura, serán de todo el gusto
de sus seguidores habituales, pero no precisamente para el gusto
de todos los paladares aficionados.
  A destacar la portada de este número,
un homenaje a la portada del mítico Giant-Size X-men # 1 (1975).
Nota: 5,0.
  
Entretenida lectura, sin embargo, no apta para un publico transversal. Hay que tenerle simpatía a Larsen y su obra para disfrutarla a full.
Nota: 5,0.
Nota: 5,0.
Zeus convoca al dios Atlas a su sala del trono y exige saber qué le ha sucedido a Hércules, ya que no ha regresado de su misión en la Tierra. Atlas revela que el Escuadrón de Dios ha sido prácticamente aniquilado y que Hércules ha quedado gravemente herido bajo la custodia de la S.O.S. Atlas propone formar un grupo de rescate, pero Zeus exige algo mucho más poderoso. La noticia del estado de Hércules es casi insoportable, por lo que ordena a Atlas que reúna un ejército para completar la misión del Escuadrón de Dios.
She-Dragon está furiosa porque Chris y Alex parecen haber retomado su relación y abandona la comisaría enfurecida. Bludgeon la atrapa en un callejón; no pretendía asustarla ni lastimarla, pero subestimó su fuerza. Bludgeon le pide que visite uno de los laboratorios de Johnny Redbeard en busca de un dispositivo que le permita transformarse entre su forma actual y su apariencia humana original.
En la extremadamente peligrosa Isla de la Radiación, Brute Force ha aceptado una misión de Stephenson. Asumen que el S.O.S. estaba demasiado asustado para aceptar la misión y Max Damage informa que, si tienen éxito, Stephenson les tiene más trabajo. El monstruo al que habían sido enviados a enfrentarse emerge y devora a Major Battle y Moe Muscle. Persigue a Max Damage, pero la inestabilidad de sus cuerpos provoca que explote.
Hércules se recupera en el hospital tras una cirugía que logró reimplantarle los brazos amputados, aunque tardará un tiempo en recuperar su funcionalidad. Smasher lo visita y le informa que el S.O.S. desea recuperar a sus miembros, secuestrados por el Escuadrón de Dios y enviados al Mundo de los Dioses. Sus científicos tienen la tecnología lista para abrir un portal, pero necesitan información sobre el paradero de los prisioneros. Hércules declara que los dioses desconocían que los mortales pudieran cruzar la distancia entre la Tierra y el Mundo de los Dioses, por lo que sus cautivos viven en libertad en su nuevo hogar.
Los funcionarios gubernamentales que dirigen la S.O.S. celebran una reunión y anuncian que Vanguard vuelve a trabajar para ellos. Rock, Widow y Zeek han insistido en participar en una misión de rescate al Mundo de los Dioses y llevarán rastreadores en su ADN para poder traerlos a todos de vuelta. Stephenson no tiene intención de enviar a muchos miembros y habría usado a Brute Force de no haber sufrido tantas bajas.
Hawkins señala que Max Damage está ansioso por complacer y promete tener un nuevo equipo operativo pronto. Kill-Cat ha estado suplicando una oportunidad para impresionarlos y Hawkins sugiere usarlo como carne de cañón.
Max Damage organiza una audición abierta para completar las filas de Brute Force, pero el nivel de los aspirantes deja mucho que desear. Metal Man, Water Lad, Wood Boy y Bubble Boy resultan ser completamente inútiles. Beast Boy se entusiasma ante la perspectiva de unirse a Brute Force, a pesar de sus fracasos anteriores como héroe en S.O.S. y trabajando con Kill-Cat.
She-Dragon se cuela en el laboratorio de Johnny Redbeard, buscando un dispositivo similar al que Bludgeon deseaba. Ignora por completo la existencia de tal mecanismo, pero sabe que su creador robaba todo tipo de maravillas tecnológicas, así que sin duda es posible. Su entrada no pasa desapercibida y se activa un sistema de seguridad que comienza a vigilarla.
Mientras se mira en el espejo del baño, William se sorprende al ver de repente a Dragon reflejado en su rostro. Dragon declara que cuando William atacó a Cadaver y el hechizo del villano se interrumpió, su esencia se fusionó con su cuerpo. Desde entonces, ha estado hablando directamente a la mente de William, instándolo a enfrentarse tanto a su hermano como a los dioses.
Max Damage llega al Complejo Uno para presentarle a Stephenson su nuevo Brute Force, quien le da el pésame por la muerte del Mayor Battle y Moe Muscle. Les informan sobre la situación del secuestro de S.O.S. Los miembros del grupo explican que la misión al Mundo de los Dioses consiste simplemente en entrar y salir sin incidentes, evitando el contacto con el enemigo a menos que sea absolutamente inevitable.
Rock le ruega a Smasher que los acompañe en la misión, ya que su conocimiento del terreno podría ser crucial. Smasher rechaza la petición, pues no puede arriesgarse a dejar sola a su hija si la matan o queda varada de nuevo. Kill-Cat llega para unirse al grupo de superhéroes y Rock se enfurece al instante con su presencia, pues aún desea verlo arrestado por su participación en la muerte de algunos de sus hombres. Stephenson señala que necesitan tantos héroes capaces como sea posible para esta misión y Rock acepta la decisión. Recibe a Kill-Cat a regañadientes, pero le ordena que no toque nada…
Nota: 5,0.
Valga mencionar que actualmente Planeta Cómic está publicando tomos compilatorios de Savage Dragon. Han salido tres volúmenes a la fecha, y ya se está publicando material que previamente estaba inédito en español. Ojalá estos tomos logren abarcar bastante de la historia del personaje en el papel.
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