Reseñado
por: JML
Edición
original:
Captain Atom # 28 (Abr-1989)
Guión: Cary Bates, Greg Weisman.
Dibujo: Pat Broderick.
Tintas: Romeo Tanghal.
Color: Gene D’Angelo.
Portada: Pat Broderick.
Guión: Tras 28 números de tramas conspirativas gubernamentales, Nathaniel
Adam por fin obtiene las pruebas que necesitaba para probar su inocencia. Ha
sido una búsqueda frenética por la verdad que ha dado sus frutos, aunque
como buena serie de comic-books que se precie, de todas maneras, quedan algunos
cabos sueltos por atar a futuro. Particularmente en este caso, como se
puede comprobar en la página final, un gran cabo suelto…
Cary Bates y Greg Weisman realizaron un
trabajo diligente y elegante, que supo posicionar de buena manera al
Capitán Atom en el panorama del universo DC post-Crisis, recordando además
que fue la instancia en que el personaje se integró formalmente a la
continuidad del universo DC principal, siendo originalmente un personaje de
Charlton comics. La reinvención del personaje en el núcleo del
universo DC se presentó dinámica y convincente, en primera
instancia, haciéndolo notar por sus propios méritos.
Se agradece un trabajo que quizás no fue perfecto, pero que se nota fue hecho con cariño y planificación.
Nota: 6,0.
Arte: Pat Broderick hizo suyo al personaje en este primer gran arco que
supusieron los primeros 28 números de la serie del Capitán Atom. Su diseño,
que para la época había cambiado en relación a su diseño original
de Charlton, con motivo a su inserción al universo DC y nuevo
origen, fue un total acierto, en más de un sentido volviéndose en el
look definitivo del personaje para las generaciones por venir. Como lo he
dicho en otras reseñas; así como John Byrne fue relevante para Superman,
o George Pérez para Wonder woman en el período post-Crisis, de igual
manera lo fue Broderick para el Capitán Atom. Quizás su trabajo no
fue tan bien apreciado en el momento dado, pero sin duda que quienes
gustamos del personaje, sabemos valorarlo a bien.
Nota: 6,0.
Se agradece un trabajo que quizás no fue perfecto, pero que se nota fue hecho con cariño y planificación.
Nota: 6,0.
Mientras tanto, el Camboyano está en Lockleed Aircraft quemando todos los archivos relacionados con Alec Rois y el caso de Nathaniel Adam bajo el mando de Ghost. Mientras quema los archivos, el Camboyano recuerda cómo Nathaniel fue incriminado por el asesinato del general Lemar. En realidad, Nathaniel fue drogado discretamente durante su discusión con el general. Después de que Nathaniel se desmayara, el Camboyano entró en la habitación y tomó el cuchillo de combate de Nathaniel para matar a Lemar, quien era considerado una responsabilidad no deseada para Green Elite debido a su codicia ciega. Al mismo tiempo, Ghost hace que Bolt termine donde lo dejó con el General Eiling.
Bolt está esperando que Ghost reciba su pago final. Cuando llega el avión personal de Ghost, lo que Bolt encuentra en la cabina es una bomba: Ghost consideró que su asesino era un cabo suelto de la conspiración. Bolt aparentemente muere en la explosión. Justo cuando Ghost y el Camboyano se regodean por su éxito, el Capitán Atom, Eiling y Goslin llegan a la escena. Bolt resulta haber sobrevivido gracias a su teletransportación. Se desata un feroz combate cuerpo a cuerpo a tres bandas.
Bolt y el Camboyano son derrotados, pero el primero se teletransporta. Pero Ghost, sin embargo, es demasiado poderoso y domina a Nathaniel. Ghost se regodea ante Nathaniel al revelarle al verdadero culpable que estaba detrás de su trampa. Él revela que ha estado ocultando a un pasajero oculto que había ocultado dentro del campo cuántico desde su muerte "prematura" a manos de Bolt hace días: Henry Yarrow. Yarrow admite ante un sorprendido Nathaniel que siempre ha sido miembro de Green Elite y lo incriminó deliberadamente para garantizar el secreto de la red de narcotraficantes. El detective corrupto toma la espada de filo ionizado X del Camboyano y Ghost le indica que un corte fatal en el corazón de Nathaniel acabará con él. Pero Nathaniel es salvado por Eiling, quien le dispara a Yarrow en la cabeza. Luego, Ghost se ve obligado a retirarse al campo cuántico. Con la amenaza aparentemente terminada, Nathaniel le da las gracias a Eiling y se siente muy aliviado de que su pesadilla haya terminado, ya que Eiling está convencido de exonerar públicamente la inocencia de Nathaniel.
Esa noche, Ghost se teletransporta al Pentágono, donde se reúne con el verdadero cerebro detrás de Green Elite: el General Eiling. Él y Ghost habían estado trabajando juntos para limpiar los cabos sueltos todo el tiempo. Yarrow era sólo un peón para engañar a Nathaniel, en quien Eiling obtuvo deliberadamente su confianza para supuestamente salvar la vida del héroe…
Nota: 6,0.
Como queda de manifiesto en el final de este número, el General Eiling siempre estuvo detrás de todo, y toda esta parafernalia no fue, sino más que un gran truco para limpiar sus huellas, todo lo que podría incriminarlo a él. Sencillamente, un diablo vestido de oveja. Respecto al Capitán Atom, el cierre narrativo que ofrece la conclusión de estas primeras 28 entregas, además coincide con su nominación como líder de la rama europea de la JLI. A partir de la siguiente entrega, las aventuras del buen Capitán en su serie regular comenzarían a tener un matiz más superheroico, con el tema conspirativo más apaciguado, pero siempre presente.
Será hasta una próxima ocasión. Qué tengas un excelente día. 😉
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