LIGA DE LA JUSTICIA AMÉRICA: GNORT POR GNORTOESTE – DC COMICS

Reseñado por: JML
Edición original: Justice League America # 36 (Mar-1990)
Guión: Keith Giffen, JM DeMatteis.
Dibujo: Tom Artis.
Tintas: Art Nichols.
Color: Gene D’Angelo.
Portadas: Adam Hughes.
 
 
Guión: Era tiempo para un número relleno de la serie de Justice League America, por lo que Giffen y DeMatteis decidieron sacar una de sus cartas secretas bajo la manga: al único e inigualablemente ridículo Gnort, el Green Lantern más inepto de todos los tiempos. Aunque resultase difícil de creer, Gnort tenía un némesis, quizás no tan ridículo como él, pero sí demasiado patético en sus intentos de acabar con él. En el verdadero trasfondo de las cosas, Scarlet Skier venía a ser una parodia de Silver Surfer de la Maravillosa Competencia, así como su jefe, Mr. Nebula, a su vez una parodia de Galactus.
 En lo personal, he de reconocer que este número no me pareció tan entretenido como otros de la JLI de Giffen y DeMatteis. A menudo Gnort es tan ridículo y patético que, en vez de causar risa, llega a causar pena ajena. Es comprensible que los Leaguers no quieran involucrarse con él, y una lástima que en este caso sus desventuras le quite el foco de atención a los verdaderos protagonistas.
 Uno de los puntos más bajos de esta recordada etapa.
Nota: 3,5.
 
 
Arte: Esta historia probablemente parecería mucho mejor si hubiese sido ilustrada por Kevin Maguire o Adam Hughes. El trabajo del artista de relleno, Tom Artis, no es del todo terrible, pero de ninguna manera está a la altura de los artistas antes mencionados. No logra realzar visualmente a la tonta parodia de Silver Surfer que debuta en esta entrega, y no luce a Gnort como el protagonista de la historia.
 En definitiva, este número es una clara muestra de lo importante que es contar con el arte apropiado para redondear un cómic.
Nota: 3,5.

 
Historia: Gnort se encuentra contemplando su vida en la Tierra, sentado en un roquerío costero. Se encuentra aburrido, muy aburrido. Tanto así que cree que es tiempo de hacerle una visita a sus “amigos” de la JLI.
 En el planeta Cairn, en la sede de L.E.G.I.O.N., el prisionero *314-B27, también conocido como Scarlet Skier, le jura a Lyrissa Mallor que no volverá a surcar por el espacio, tras lo cual es liberado. Todo era una mentira para obtener la libertad, pues en realidad su único deseo es vengarse del Green Lantern que lo capturó, Gnort.
 Gnort acude hasta la embajada de la JLI en New York, donde es ignorado. Ninguno de sus “amigos” Leaguers le presta atención. Nuevamente aburrido sobrevuela la ciudad, cuando ve algo que se estrella en Central Park. Se trata de Scarlet Skier, quien precisamente lo busca para matarlo. Ambos comienzan a pelear.
 La JLA es alertada de lo acontecido. Mister Miracle y Fire van hasta el lugar de los sucesos, donde Gnort está siendo arrestado. Ellos se hacen cargo de Gnort, quien les cuenta que estaba peleando contra su “némesis”, Scarlet Skier. Resultando difícil creer que alguien tan ridículo como Gnort tenga un némesis, este les cuenta la historia de Scarlet Skier. Skier es el heraldo de una fuerza cósmica conocida como Mr. Nebula, un decorador de planetas cuyo único objetivo es dar color y diseño al universo.
 Scarlet Skier ha quedado decepcionado tras nuevamente perder contra Gnort y va hasta las Torres Gemelas para acabar con su vida. Gnort aparece justo a tiempo para salvarlo. Skier no puede creer que Gnort ni siquiera lo deje suicidarse en paz. Al contemplar lo ridículo del asunto, Mister Miracle y Fire deciden dejar a los dos idiotas solos.
 Más tarde, Gnort sigue contemplando su vida en el roquerío costero, ahora en compañía de Scarlet Skier. Gnort le pregunta a Skier si le gustaría ser su sidekick, y este lo empuja hacia el mar…
Nota: 3,5.
 

 
Nota final: 3,5 (Chile) / 5 de 10 (Global).
 Respecto a la publicación de estos cómics en kioskos chilenos durante los años 90’s - por cortesía de Editorial Perfil, de Argentina -, este fue uno de los números que se saltaron y nunca vio la luz por estos lados, en tiempos en que las tiendas especializadas eran prácticamente nulas. Sin duda que fue una lástima para quienes fuimos coleccionistas en aquella época.
 
 Para el siguiente número, la primera parte de dos de la historia “Bola de pelos”, otro cross-over entre la JLA y la JLE.
 
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 Será hasta una próxima ocasión. Qué tengas un excelente día. 😉